Gustavo Trelles
El minuano estuvo ocho años totalmente alejado del rally. Ni siquiera iba a ver una carrera. Pero el año pasado aceptó la invitación de Martín Christie (su copiloto cuando ganó los mundiales de 1998 y 1999) para probar un auto en las sierras cordobesas. En ese momento volvió a despertarse esa inextinguible pasión que estaba adormecida. Fue allí que decidió volver a competir. El pasado fin de semana ganó el Rally del Atlántico, demostrando vigencia y competitividad.
NELSON VICENTE
-¿Cómo surgió la posibilidad de retornar?
-En forma impensada. Después de ocho años de inactividad y de haber rechazado infinidad de invitaciones para correr en Europa, acepté ir a hacer las pruebas. Fue una lindísima experiencia. Me sentí como si nunca me hubiera bajado del auto, lo manejé bien de entrada y logré muy buenos tiempos desde el primer momento, pero el estado físico no me permitía competir.
-¿Por qué nunca aceptó volver a Europa a competir?
-Cuando dejé de competir nunca más miré una carrera por televisión, nunca más fui a un rally ni a una carrera en pista. Me desenchufé totalmente. Por eso nunca acepté ir de vuelta, porque sabía que si era competitivo me iban a venir otra vez las ganas de competir, porque esto del rally es una pasión que nunca se extingue.
-¿Y por qué aceptó ahora?
-Porque hacía tiempo estaba con ganas de probarme y acepté ir a hacer pruebas con el equipo de Federico Villagra, campeón argentino, con autos de primera y para saber en qué nivel estaba. La sorpresa fue excelente me sentí impecable y los tiempos fueron los mejores. No tenía el físico, pero el talento estaba. Y me dio la impresión que sería una injusticia no aceptar las invitaciones y así empecé a prepararme físicamente, al punto que hoy estoy mucho mejor de lo que estuve en mi mejor época del campeonato del mundo.
-¿Y tiene tiempo?
-Ahora me siento dispuesto a competir nuevamente y dispongo del tiempo que no tenía hasta el año pasado para poder hacer esto. Estaba abocado a asuntos que ni siquiera me hubieran podido permitir entrenar. La pasión es la pasión y creo que va a ser una muy buena época. Realmente, tengo muy buenas expectativas.
-¿Le parece que podrá ser competitivo?
-Si no me pareciera, no participaba.
-Competitivo desde que se subió por primera vez en una moto a dar la vuelta por la Plaza de Minas.
-Exactamente. Desde ese día la competitividad es lo que me ha llevado a tener anhelos que se puedan cumplir. Nunca me subiría a un auto si no puedo ganar o si no tengo la expectativa de ganar. Es la competitividad la que me ha dado tantos resultados. Mi fuerte siempre fue el psicológico. Eran los demás los que me tenían que salir a ganar y no yo a ellos.
-¿Cuándo vio que era posible estar al primer nivel?
-Al principio del año hice dos carreras con un perfil muy bajo y para saber cómo estaba dentro de los tiempos. El saldo personal fue buenísimo. El campeonato argentino es uno de los más competitivos. En el Rally de Córdoba hubo 42 participantes en el Grupo N. Y hasta el último tramo, que fue cuando abandoné, venía cuarto. Los tiempos estaban parejos, y con un auto que me era absolutamente desconocido. Le agarré la mano en carrera. Sentí como si hubiera corrido apenas seis meses atrás. Me encantó y empecé a aceptar las invitaciones y fui a la "Trepada del Nido del Águila" y al Rally Legend de San Marino.
-Y cerró la temporada ganando frente a su público.
-Sí, el saldo ha sido muy positivo. Todo esto me deja con un buen sabor. Sé que estoy pronto, bien entrenado. Físicamente estoy entrenado como nunca, pero lo más importante es que he podido comprobar que arriba del auto no me he olvidado de nada y puedo ser tan rápido como antes.
-Volvió a estar en la lucha por el liderazgo, algo que no ocurría desde su triunfo mundial en Córcega 2002.
-Me sentí tranquilo, muy cómodo en la carrera, que fue muy competitiva, con un final en el que gané por menos de nueve segundos contra pilotos de muy buen nivel. El primer día logramos una diferencia y en la segunda etapa la administramos.
-Este fin de semana compite en Chile.
-Voy invitado por la organización de la tradicional carrera en el cierre de la temporada y que nos provee los autos. En este caso, además de lo que uno pueda manejar, hay que tener la suerte de contar con un auto bueno.
-¿Cuáles son los planes para el año que viene?
-A lo que me comprometería sería a volver a hacer un campeonato mundial. Tras esta prueba me quedó claro que estoy para ganar cualquier carrera del campeonato del mundo. De no ser eso, que es una ilusión, me dedicaré a pruebas en Europa y Sudamérica, pero sin seguir ningún evento específico.
