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Al decir saltos ecuestres, se pensaba en Marcelo Chirico, una de las grandes promesas-realidades del deporte uruguayo. Pero en los Juegos Panamericanos fue Martín Rodríguez el que se robó la atención, quedando muy cerca de los Juegos Olímpicos.
Todo comenzó el jueves. Cuando Rodríguez, con Cointreau Z, logró clasificarse a la final de saltos ecuestres: fue 30° y se metían 25 binomios, pero como sólo podía haber tres jinetes por país en la final, justo quedaron cinco plazas que le dieron el lugar al uruguayo. "Estoy con muchas ganas de competir. Es un gran logro estar en esta definición con los mejores, me llena de orgullo y es como un premio al trabajo realizado", había comentado Rodríguez en la previa de la final a La República.
Y ayer, el uruguayo quedó a un pasito de Londres: fue 19°, a tan sólo un punto de la clasificación a los Juegos Olímpicos. En el primer recorrido, fue 24° de 25 con dos faltas y dos puntos por exceso de tiempo, pero en el 2° recorrido anduvo casi perfecto: pista perfecta y apenas dos puntos por exceso de tiempo.
El uruguayo, del Cecade, fue el último en conseguir clasificación a los Juegos Panamericanos y hace sólo dos meses que está con Cointreau Z.
"Competimos con los mejores y estuvimos a nivel", comentó Martín a La República. El uruguayo terminó con 34.55, a un punto del argentino Larroca, que con 33.49, fue el último clasificado directo a los Juegos. Ahora la Federación Uruguaya de Deportes Ecuestres a través del Comité Olímpico Uruguayo solicitará a la Federación Internacional de Equitación y a la organización de Londres 2012 la admisión del jinete para participar del evento. De lograrlo, será el primer uruguayo en cuarenta años que competirá en esta disciplina en los Juegos Olímpicos.
¿Y Chirico? Marcelo Chirico, campeón de los Juegos Olímpicos de la Juventud en 2010, aspiraba a más. Pese a pasar del 1.20 metro en Singapur, a los 1.60 (altura olímpica) de los Juegos Panamericanos, el riverense estaba a la altura de meterse en la final de salto ecuestre, al igual que Martín Rodríguez. Pero terminó 43°, lejos de la clasificación. ¿Qué pasó? Su yegua, Omanie Du Landais, compitó lesionada. El 4 de octubre, tras un herraje, le mancaron la mano izquierda y en el aeropuerto mexicano, le lesionaron la derecha. Las lesiones fueron tan graves que se dudó con que pudiera volver a competir y hasta se necesitó una segunda inspección veterinaria para el debut para que fuera aprobada. Así Omanie Du Landais llegó a la competencia panamericana casi sin entrenamiento, lo que se sintió en su nivel.
Por equipo, últimos. Uruguay terminó 11° en la competencia por equipos, último entre los que terminaron ya que Perú se bajó. Los uruguayos terminaron con tres jinetes: Martín Rodríguez, Marcelo Chirico y Carlos Cola, porque Federico Daners no terminó su participación.
Foto: El Observador
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