En el debut había quedado en evidencia. La realidad golpeaba a las chicas que, luego del gran Sudamericano donde había conseguido la clasificación, partían hacia Azerbaiyán con muchas ilusiones. Sin embargo, las diferencias son muchas con respecto a otras selecciones. No en materia de calidad, no en materia de entrega, no en cuanto al amor por la camiseta. Pero ese amor no gana partidos cuando la brecha es tan grande.
Las chinas, en el primer partido, demostraron una gran organización, orden en su juego y muy buen estado físico. Este miércoles, Ghana volvió a demostrar algo similar pero con físicos realmente superiores. Cada corrida era ganada por ellas, cada salto, cada disputa. Y no se trata de que nuestras chicas iban flojas, pero es así, eran más fuertes.
Cada vez que enfrentamos a una selección africana juvenil decimos lo mismo “estos se van a anotar solos al registro”. No caigamos en eso y aceptemos que, en este caso, estamos un nivel más abajo.
Uruguay está disputando su primer mundial en la rama femenina en cualquiera de sus categorías y eso hay que destacarlo. No se puede pretender ir por primera vez y hacer historia, pero sí se debe pretender sacar provecho de esto, aprender y sacar conclusiones a futuro. Más aún con una selección sub 17 que está dando sus primeros pasos y que demuestra que el fútbol femenino uruguayo tiene un futuro enorme. Ya llegarán los tiempos de las grandes victorias a nivel mundial. Es cuestión de tiempo… Y de apoyo. Mucho apoyo.
En cuanto al partido, las ghanesas abrieron la cuenta gracias a un cabezazo de Jane Ayieyam a los 8’ tras un corner. Más tarde, a los 24’, Prisilla Okyere duplicó diferencias (también de cabeza), luego que la golera uruguaya Anabel Ubal despejó un centro que llegó desde la derecha.
Antes de terminar la primera mitad, Alberta Ahialey anotó el tercero tras un error en el cierre de Ubal, que no pudo controlar el balón y le dejó servido el gol a la africana.
Uruguay dispuso de alguna situación de gol en la primera mitad, en los pies de Carolina Birizamberri y de Yamila Badell. Sin embargo, la portera ghanesa respondió bien. La más clara, tal vez, fue la de la nº 10 celeste que, luego de una gran corrida, no pudo definir de la mejor manera en el mano a mano.
A la vuelta del descanso, más de lo mismo. Ghana atacó, dominó y volvió a encontrar el gol. Nuevamente a la salida de un corner, el rechazo le quedó a Fatima Alhassan que, con un gran remate desde afuera del área puso el cuarto. Un minuto más tarde, Okyere puso cifras definitivas al marcador con un gol desde el borde del área.
Cuando el partido se iba, Badell agarró la pelota afuera del área y sacó un tremendo remate que se estrelló el travesaño. Merecía ser gol para darle a esta selección un merecido premio por su entrega y dedicación.
No se pudo contra Ghana y las chicas quedaron eliminadas. Ahora enfrentarán a Alemania que en lo previo parecía el rival más complicado. Será el próximo domingo a las 9:00, televisado por Canal 4.
"Fue un partido muy duro, pero dimos todo lo que teníamos. Conocíamos el estilo de juego de Ghana, aunque las diferencias físicas fueron demasiado grandes. ¡Son muy rápidas! Se nos hizo demasiado difícil" aseguró Graciela Rebollo, entrenadora celeste, que luego del debut había asegurado que las chicas no se habían guardado nada.